Día mágico en Miami para Lando y Mclaren F1

Las primeras veces siempre tienen un sabor especial, y el piloto de McLaren lo sabe bien. Llevaba mucho tiempo esperando y por fin llegó el momento. La primera victoria de Norris en la Fórmula 1 catalizó la atención del público, de los rivales y de los aficionados en Miami, para alegría generalizada. Porque nunca se olvida la primera vez.

Con 24 años, el británico debutó con McLaren en 2019 y esta es su sexta temporada con la escudería de Woking. Hasta el GP de Miami acumulaba un récord de 15 podios sin ninguna victoria, por lo que la alegría tras cruzar la línea de meta fue desbordante, «¡lo conseguimos! ¡Por fin lo hemos conseguido! Os quiero a todos».

Lando firmó una obra maestra, aprovechando las circunstancias en un fin de semana que podría haberse dado por hecho teniendo en cuenta que Verstappen marcó la pole y el sábado, la Calificación, y el Sprint. Pero esto pertenece al pasado. El éxito de Lando hizo que todo lo demás se desvaneciera, incluido el incidente en el Sprint que le vio involucrado en el choque en la salida entre Alonso y Stroll.

Norris confesó que lo sabía desde por la mañana. «Tenía el ritmo y sentía que éste era el día». Simplemente pura suerte o la estrategia perfecta, Lando aprovechó el Safety Car en la vuelta 29. Su mágica parada en boxes le permitió tomar la primera posición que mantuvo hasta el final. La determinación de Lando fue crucial en la reanudación de la carrera tras el Safety Car, cuando Verstappen intentó atacarle. A partir de ese momento, gracias a unos neumáticos renovados y a un ritmo muy sólido, construyó un hueco y pasó a ganar después de 110 Grandes Premios en su carrera. 
 

No fue la carrera más sencilla para él, ya que tomó la salida en quinta posición, remontó hasta la sexta y luego tuvo que luchar para abrirse paso. «Todo el fin de semana ha ido bien. He tenido algunos contratiempos por el camino, pero el viernes sabía que teníamos ritmo. Cometimos un par de errores aquí y allá, pero el domingo conseguimos juntarlo todo", confesó, “aplicamos la estrategia perfecta, todo dio sus frutos, así que gracias a McLaren”.

El grito dentro del casco, el puño hacia el cielo, el abrazo colectivo con el equipo y luego uno a uno con todos los demás pilotos que se acercaban a felicitarle: Fernando Alonso, Carlos Sainz, Charles Leclerc, incluso Max Verstappen se alegró de que si le tenían que ganar, mejor que fuera Lando. Es imposible no quererle, todo el mundo en el paddock de la F1 estaba realmente feliz por su ansiada primera victoria.

«Esta victoria ha tardado mucho en llegar y ha sido increíble. Había una gran multitud, todo el equipo. Si tengo que recordar ese momento en lo alto del podio, habrá muchas sonrisas, muchos aplausos. He soñado con estos días, pero nunca sabes cuándo van a llegar. El domingo fue ese día».

Para Lando fue pura felicidad y un gran alivio. «Es difícil describirlo con palabras. Mi mente se volvía loca y pensaba muchas cosas, pero al mismo tiempo estaba tranquilo. A veces me sentía un poco solo y es agradable reflexionar sobre todo lo que has hecho para llegar a este punto».

Como un buen chico, Lando llamó inmediatamente a sus padres y se emocionó visiblemente: sonrió, lloró, estaba en la luna. «Me pareció natural llamar a mis padres. Me han apoyado tanto: son los que están contigo desde el principio, los que me metieron en las carreras, me apoyaron y me permitieron llegar a la Fórmula 1, alcanzar mi sueño y hacer lo que me gusta hacer desde que era un niño».
 

Lando no podía dejar de sonreír al mirar atrás: su vida, como una película, se desarrollaba ante sus ojos: «Tuve recuerdos de cada momento que me llevó a donde estoy ahora, como mi primera vez en un circuito de carreras cuando tenía cinco años. Mi hermano, mi padre y yo estábamos allí viendo pasar los coches. Es increíble mirar atrás desde lo alto del podio».

«Conseguir la primera victoria siempre es increíble. He tenido mis momentos en los que hemos estado cerca, y nunca he sido capaz de convertirlo en victoria. No estaba preocupado, pero en cierto modo este resultado me quita un peso de encima. Mucha gente dudaba de que fuera capaz de conseguirlo y ganar una carrera. He seguido siendo paciente. Este año tenía más confianza que nunca en que el equipo y tenemos lo que hace falta. He seguido trabajando duro y haciendo lo que mejor sé hacer. Sabía que iba a llegar mi momento».

La victoria de Lando fue un éxito de equipo, fruto de un duro trabajo que comenzó con el director del equipo, Andrea Stella, protagonista de la reconstrucción de la escudería. La llegada a Miami de las actualizaciones del coche de Lando puso su resultado como punto culminante del trabajo estratégico que hizo brillar a McLaren.

«El equipo ha hecho un trabajo increíble. El año pasado ni siquiera estábamos en la Q2 aquí", comentó el británico, »mira dónde estamos ahora: estamos arriba y hemos ganado una carrera. Hemos hecho un trabajo increíble para pasar de donde estábamos a donde estamos ahora».

Las actualizaciones llegaron según lo previsto, y marcaron la diferencia, pero no fueron los únicos ingredientes del éxito de Miami. «Los dos últimos meses han sido increíbles: mucho trabajo para poder cumplir por fin. Las actualizaciones desempeñaron su papel, pero creo que fue la suma de muchas pequeñas cosas lo que hizo que el día mágico fuera perfecto».